Desde que habitamos en ciudades y trabajamos en edificios hemos ido perdiendo la perspectiva real del ser humano en el mundo. Cuando explico sistema representación cónico, los alumnos, sorprendidos, adquieren cierta consciencia sobre la verdadera dimensión de si mismos. Y es que somos muy pequeños, insignificantes en medio del espacio que supone esta tierra.
Este es un cuadro que adoro, es de un pintor romántico, Friederich, se titula "Monje mirando al mar" y cuando lo contemplo me embarga la sabiduría de saberme pequeña en mitad de la nada, frágil y prescindible y eso me ayuda a ser mas humilde y modesta en mis logros.
Algún día cumpliré mi sueño de ir hasta Berlin a contemplar esta obra en vivo y sentir que estoy de pie junto a ese hombre que pierde su mirada en ese mar osucro e infinito.
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